Matrimonios del mismo sexo: temas de actualidad en el cristianismo

Matrimonios del mismo sexo: temas de actualidad en el cristianismo

Matrimonios del mismo sexo: temas de actualidad en el cristianismo

Enviado ByAdministratoron 12/02/2013 (Visitas: 263) (Votos: 0)

INNews y Sociedad

Matrimonios del mismo sexo y el cristianismo

Desde que el movimiento protestante se separó de la corriente principal de la iglesia que era la católica después de que el rey de Inglaterra desobediencia al Papa, ha habido controversias entre las dos denominaciones que parecen no tener fin. Entre ellos cabe citar el asunto mucho climatizada de matrimonios del mismo sexo. Estos incluyen las lesbianas y los gays. Las lesbianas son mujeres, mientras que los gays son hombres. Mientras que la Iglesia Católica está totalmente en contra el matrimonio del mismo sexo, los protestantes son en parte en apoyo de las mismas en especial las principales iglesias protestantes en Estados Unidos y Gran Bretaña. Vale la pena señalar que el jefe de la Iglesia anglicana que ha tenido algunas controversias de los homosexuales que inclinan positivamente hacia la orientación es el rey de Inglaterra.

El matrimonio del mismo sexo implica un matrimonio en el que las dos partes que se casan son del mismo sexo (Boswell, 1996). Esto incluye a un hombre y otro hombre o una mujer y otra mujer. Matrimonios del mismo sexo también se puede decir que los matrimonios en los que no habrá descendencia. Esto, aunque no se debe confundir con actos sexuales entre un hombre y una mujer en la que los anticonceptivos son utilizados para evitar la concepción y por lo tanto la reproducción.

Matrimonios del mismo sexo han sido inherentes en muchas culturas alrededor del mundo desde hace mucho tiempo en la historia. Por ejemplo, durante el reinado de la dinastía Ming de China en los hombres y las mujeres se involucren en algunas ceremonias especiales con sus compañeros hombres y mujeres, respectivamente (Neill, 2009). El récord nunca antes de la homosexualidad, aunque ocurrió en el Imperio Romano. Un emperador conocido como emperador Nero está en el registro de haber participado él mismo en un acto homosexual con un sirviente en el palacio (Neill, 2009). Otro caso aún en el Imperio Romano es el de emperador Heliogábalo y un esclavo llamado Hierocles. A pesar de estos hechos, es importante tener en cuenta que los matrimonios del mismo sexo no son legales según la ley romana. El derecho romano sólo reconoce los matrimonios entre hombres y mujeres. Inicio sexualidad también ha sido grabada en la sociedad griega. El gran filósofo griego dijo una vez que el amor de un hombre por otro hombre llevó a los hombres a actuar honorablemente.

Ha habido diferentes puntos de vista entre los cristianos sobre los matrimonios del mismo sexo. De acuerdo con la doctrina cristiana, el matrimonio es la unión entre un hombre y una mujer que es ordenado por Dios (Rubio, 2003). El matrimonio es una institución respetada entre los cristianos, pero no es una necesidad. Varios de los apóstoles cristianos como Pablo y otros nunca se casó. Es cuando se espera que una persona soltera debe practicar la santidad y mantenerse alejado de la inmoralidad a toda costa.

Según la Iglesia Católica, el matrimonio debe ser entre un solo hombre bautizado y otra mujer bautizados (Rubio, 2003). Cualquier otra forma de unión con independencia del sexo es considerado por la Iglesia Católica como el pecado. Rubio (2003) continúa diciendo que los católicos creen que el matrimonio debería ser una institución en la que tiene lugar la procreación. Es debido a esto que los fieles católicos están en contra de los anticonceptivos en la institución del matrimonio. Por lo tanto, los homosexuales no tienen cabida en la fe católica, ya que no practican matrimonios de diferente sexo.

Los homosexuales o los matrimonios del mismo sexo también son incapaces de procrear. Lo que también las de los católicos comprensión del matrimonio distancias. Papa Benedicto que actualmente es el jefe de la Iglesia Católica afirma claramente que la homosexualidad es moralmente malo. Sin embargo, él continuaba afirmando que a pesar del acto inmoral, los homosexuales deben ser despreciados y discriminados, sino que deben ser recibidos en la Iglesia y reciban orientación, consejo y apoyo. La Iglesia Católica no permite que los homosexuales están entre sus sacerdotes, y ha estado continuamente en contra de cualquier reconocimiento legal de los matrimonios del mismo sexo.

Los protestantes, por otra parte no tienen grandes puntos de vista divergentes de los de los católicos sobre el tema del matrimonio. Surgen opiniones divergentes en lo que respecta a la cuestión de los matrimonios del mismo sexo. Algunas iglesias protestantes reconocen plenamente y aceptar homosexuales y en consecuencia los matrimonios del mismo sexo. Algunos, como los Pentecostales descrédito totalmente homosexuales e insisten en que se arrepintieran de sus pecados para ser aceptados como cristianos. Iglesias como la Iglesia Unida de Canadá, la Iglesia de Suecia, la Iglesia Episcopal y la iglesia unida entre otros no consideran la homosexualidad como inmoral. Incluso permiten mismas ceremonias de matrimonio sexo en sus iglesias. En Gran Bretaña, la conferencia general de los amigos es otro movimiento protestante que apoya los matrimonios del mismo sexo y la homosexualidad (Boswell, 1996). La tendencia a que los movimientos protestantes que apoyan los matrimonios del mismo sexo va en aumento es alarmante. Algunos incluso han ido por delante y ungido algunos miembros del clero que son homosexuales. La postura en contra de la homosexualidad y los matrimonios del mismo sexo inherentes con la Iglesia Católica es la principal diferencia entre los católicos y los protestantes en este tema.

Para señalar sin embargo que, aunque los católicos y algunos de los protestantes están en contra de la práctica de la homosexualidad, que ambos permiten homosexuales están entre sus congregaciones y animarlos a desertar de la práctica inmoral y pecaminoso. Muchos grupos de agitación, aunque están surgiendo en estas iglesias que tratan de defender a la orientación sexual de las personas que practican la homosexualidad como legal y religiosamente permanente. La Iglesia en su conjunto, no como católicos o protestantes deben adoptar una postura positiva sobre este tema, ya que está subdividiendo aún más a los fieles cristianos y amenazando a la institución del matrimonio.

Referencias

Boswell, J. (1996).Las bodas de semejanza. Uniones del Mismo Sexo en Europa pre-moderna.

London: Fontana.

Neill, J. (2009).Los orígenes y la función de las relaciones entre personas del mismo sexo en las sociedades humanas. EE.UU.:

Editores McFarland.

Rubio, JH (2003).Una teología cristiana del matrimonio y la familia.Nueva York:

Paulist Press.



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